Cielo Pérez Crespo, egresada del Centro Supérate Fundación Alberto Motta San Miguelito – Promo 2016, es Licenciada en Derecho y Ciencias Políticas, presidenta de la Asociación de Egresados Supérate Fundación Alberto Motta de Panamá y labora en Motta Int.
Cielo reside en una comunidad conocida por el alto riesgo social como la delincuencia y falta de oportunidades, pero con personas soñadoras, capacitadas, profesionales, y con muchas ganas de superación. De niña soñaba con ser de impacto positivo en su vida, familia y comunidad. Quería ser abogada, periodista e incluso arquitecta, porque le encantaba leer, dibujar y le iba muy bien en matemáticas.
Estudió en el Instituto José Dolores Moscote donde se caracterizó por ser aplicada, solidaria y participativa, siempre estaba involucrada no solo en lo académico, sino en actividades extracurriculares.
En el 2014, inició como estudiante ¡Supérate!, la llave que necesitaba para emprender su camino personal y profesional de éxito. “El Centro me formó de modo integral en habilidades duras y blandas, a ser un agente de cambio, con ello vencí retos que me hacían dudar de mí, como participar de la Beca Walton donde, aunque no la gané, logré llegar hasta la segunda entrevista lo cual fue un gran logro para mí y una hermosa experiencia.” Como joven, sacrificó muchas cosas para enfocarse en alcanzar sus metas. Todo esto le ayudó a superar los exámenes de admisión de la universidad con un buen índice y obtener una beca de estudiante distinguido en la Universidad de Panamá.
Cielo es una mujer de fe, que, ante cada adversidad, y frente a oportunidades, con miedo las toma, pero con determinación y confianza en Dios. Una de muchas cosas que marcaron su vida en el Centro fue el consejo del Profesor de cómputo: “Escojan una profesión que les apasione.
El dinero es importante y necesario, pero más gratificante es hacer lo que les gusta, que los haga sentir plenos cada día”. Estas sencillas palabras han sido su pilar diario. Su carrera universitaria fue una travesía en la que implementó todos los aprendizajes adquiridos en ¡Supérate!.
Obtuvo su título de Licenciada en Derecho y Ciencias Políticas, con honores Sigma Lambda y sobre todo estableció fuertes lazos con los docentes, quienes le ayudaban con mentorías y la recomendaban a pasantías, dando sus primeros pasos en el área legal.
Su primer trabajo fue archivar y recopilar datos en una firma de abogados. A pesar de que su mamá quería que se enfocara solo en estudiar, los gastos aumentaban en casa y a pesar de ser becada, sus libros de derecho eran muy caros. Gracias a su buen desempeño y esfuerzo le ofrecieron ser secretaria ejecutiva, esta posición le permitió fortalecer sus conocimientos y crear criterio propio. Trabajaba durante el día y estudiaba de noche.
En el 2020 llegó la COVID-19 y muchas cosas cambiaron. En medio de la incertidumbre queda sin trabajó y sin continuar su tesis, fueron momento difíciles donde la frustración parecia prevalecer, sin embargo, Cielo recordó que era una joven ¡Supérate! se levantó y dijo “Yo puedo”.
Inició desde cero, en medio de pandemia realizó otras entrevistas laborales y en un mes logró ganar una posición en una prestigiosa empresa del Grupo Motta, el cual disfruta “Me apasiona y aprendo cada día.” “Mi trabajo ha sido el soporte de mi evolución profesional, la inteligencia emocional, liderazgo y comunicación asertiva han sido mis mejores aliados para lograr relaciones con las personas de entidades públicas y privadas.” Cielo se encargá de gestionar el Derecho Tributario, un área fascinante que, a su corta edad, entrelaza la contabilidad con normas jurídicas, al punto que está explotando cada día sus capacidades de aprendizaje.
Aquí tuvo el privilegio de terminar su proyecto para obtener su título e idoneidad. Respondiendo al llamado Walk The Extra Mile, Cielo enseña catequesis de confirmación a jóvenes entre 14 y 18 años de su parroquia y organiza voluntariados con egresados ¡Supérate! “No tengo más que un sentido de gratitud por las oportunidades que me ha dado la vida, y que me va a seguir sorprendiendo, siempre que aplique dedicación, determinación, liderazgo y proactividad.
Gracias a ¡Supérate! por brindarme experiencias y herramientas que marcaron mi vida de manera positiva. El mayor legado que me dejó ¡Supérate! sin duda alguna fue la disciplina, buscando cada día la excelencia educativa y personal.”
